martes, 8 de julio de 2008

Un mapa de ruidos con sordina

El mapa de ruidos de Granada está ahí, sometido a juicio público. Es el momento de mirarlo con lupa y, si algo está mal, decirlo. Eso sí, para hacerlo hay que ir al Registro de Medio Ambiente, en horario de mañana y de lunes a jueves. El trámite de información pública comenzó el 3 de junio y hay un mes para presentar alegaciones, según se publicó en el Boletín Oficial de la Provincia, pero aún no se ha presentado ninguna, informa la concejala de Medio Ambiente, María Dolores de la Torre, que afirma que tres asociaciones han pedido información.

Asociaciones vecinales se quejan de la dificultad de acceso a la información

No se ha presentado ninguna alegación desde que se abrió el plazo el pasado 3 de junio
Ester Araúzo

Estos grupos vecinales se quejan, no obstante, de que no haya más facilidad de acceso a la información y reprochan al Ayuntamiento que, con todas las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías, éste sea el único modo de acceder al mapa.

"Desde luego hay medios más adecuados para la difusión masiva. Otras ciudades como Málaga lo han colgado en la web y en lugar de eso, el Ayuntamiento lo que hace es encerrarlo en un cuarto del Registro". El presidente de Granada contra el Ruido, Francisco Morales, considera "un fraude" el proceso de información pública.

Morales, que recuerda que la ley recoge el derecho "a recibir la información ambiental solicitada en la forma o formato elegidos", pidió el mapa de ruidos en formato digital, pero se le negó porque ya iba a someterse a información pública y además, había sido difundido en una exposición. Pero en la muestra no se podían consultar la metodología o los datos concretos, explica Morales, que hace unos días reiteró su petición.

También ha solicitado una copia del mapa la asociación de vecinos del Bajo Albaicín. "Se comentó que el Albaicín era el barrio más tranquilo, pero eso depende de cómo se hagan los cálculos", opina el presidente, Manuel Navarro, que explica que existen calles muy ruidosas, aunque haya otras silenciosas. "Hay ruidos derivados de actividades que no son el tráfico, como la marcha nocturna, y queremos ver si se han tenido en cuenta y cómo", explica Navarro, que además, exige que se amplíe el plazo para presentar alegaciones. "Creemos que hay un intento de ocultar la información. Todo han sido obstáculos", denuncia.

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