dBA, acústica

Un vecino denuncia al Conservatorio de Música accitano por «ruidos molestos»

Vive pared con pared y se queja de que el edificio no está bien insonorizado
El conservatorio arguye que ya se encontraba allí cuando adquirió la vivienda

JESÚS JAVIER PÉREZ

Un vecino ha denunciado los «ruidos molestos» del Conservatorio Carlos Ros de Guadix. La historia viene de lejos. En el tiempo, al menos, desde que Rafael García se mudó a una vivienda colindante con el centro educativo. Desde ese momento hasta que presentó la demanda ante la Policía Local de Guadix el pasado 13 de mayo pasado, se han sucedido numerosas quejas ante el centro.

Rafael García ya no tiene paciencia para seguir aguantando los ruidos. En su denuncia asegura que «lleva durante más de dos años sufriendo molestias de ruidos procedentes del citado conservatorio y más concretamente entre las 15:30 horas y 20:00 horas». Por este motivo incluso llegó a regalar al centro un paquete de tacos de goma para que los responsables del conservatorio los colocasen en las patas de sillas y mesas. Rafael García lamenta que su regalo nunca llegó a utilizarse.

Pero no sólo molesta el ruido del mobiliario. También las necesarias prácticas musicales de un conservatorio también pueden con la paciencia de los tímpanos del vecino. «Unas veces es Beethoven, pero cuando tocan 'El cochecito leré' es 'El cochecito leré' desde las cuatro a las ocho de la tarde», asegura, y eso puede con la paciencia del santo Job.

Próximamente se van a iniciar obras en el edificio que permitan acondicionarlo mejor Cuando tocan 'El cochecito leré' es 'El cochecito leré' desde las cuatro a las ocho

A otra parte

Con la música a otra parte. El vecino del conservatorio accitano pide que se insonoricen las instalaciones o que se hagan efectivo el traslado del centro a otra ubicación como, asegura el vecino, está prometido desde hace un tiempo.

Mientras y como consecuencia de «esta problemática del ruido, presenta él y toda su familia alteraciones de ánimo y síntomas de ansiedad», según reza en el texto de la denuncia. No se puede escuchar la tele. Es una de las quejas de Rafael García que lo usa también como ejemplo del nivel sonoro que alcanzan los ruidos producidos por sus vecinos. Según Rafael, todos los problemas proceden de una insuficiente insonorización en la que se encuentra ubicado el Conservatorio accitano.

Por su parte, el director del centro docente, Manuel Martín, asegura que desde el conservatorio se ha hecho todo lo posible para reducir la carga de ruidos que dice sufrir su vecino. Según Martín, se han trasladado las clases que podrían resultar más molestas a otras dependencias del edificio más alejadas.

Además de los esfuerzos que el centro dice haber realizado, Martín añade que el conservatorio ya se encontraba allí cuando su vec ino adquirió la vivienda. No obstante, Martín asegura que es un problema pasajero y que quedará resuelto en un mes. Según el director del conservatorio, próximamente se van a iniciar obras en el edificio que permitan acondicionarlo mejor a sus características musicales.

Martín recuerda que la hora a la que comienzan los ruidos descritos por el vecino no es horario lectivo. Recuerda también que el centro no sólo alberga las aulas del conservatorio y que comparte sus instalaciones con las dependencias de Educación Permanente de Adultos.